En el anterior artículo os hablábamos del papel que juega el frío y el clima de invierno en la producción de los Jamones Ibéricos, pero, es cierto, que cuando toca conservar estos productos en casa, la cosa cambia y surgen dudas.
Es por eso que hoy, vamos a aprovechar este nuevo post para responder algunas de las dudas preguntas frecuentes que soléis tener acerca de conservar ibéricos en invierno.
¡Vamos a ello!
¿Influye la temperatura a la hora de conservar ibéricos en casa?
En efecto. Si la temperatura es importante en la fase de producción del jamón y los productos ibéricos, también lo es a la hora de conservarlos, incluso en nuestra casa.
Y es que, una temperatura adecuada ayudará a mantener el sabor, la textura y la calidad del producto.
Durante el invierno, las bajas temperaturas se asemejan a las condiciones de las bodegas tradicionales, donde estos productos se curan y maduran.
Sin embargo, cuando hablamos de conservar jamón ibérico en casa u otros productos, hay algunos aspectos importantes a tener en cuenta.
Si la temperatura es demasiado alta, los ibéricos pueden secarse y perder su jugosidad.
Por el contrario, si es demasiado baja, pueden llegar a congelarse y perder su textura.
Lo ideal entonces es mantener una temperatura constante en el lugar de almacenamiento, evitando los cambios bruscos.
Ten en cuenta que la fluctuación de temperaturas puede afectar negativamente a la calidad de los productos.
Entonces, ¿A qué temperatura hay que conservar el jamón ibérico y otros productos?
En general, se recomienda conservar los productos ibéricos a una temperatura de entre 15 y 20ºC. Esta es la ideal para que puedan respirar y desarrollar sus aromas y sabores característicos.
Por otro lado, hay que tratar de evitar la exposición directa al frío. Aunque éste es beneficioso, la exposición directa a corrientes puede secar en exceso el jamón.
¿Es distinta la forma de conservación de los ibéricos en verano que en invierno?
En general, la forma de conservar los productos ibéricos suele ser similar en invierno y en verano.
Sin embargo, hay algunos factores que pueden influir en su conservación en verano.
Como hemos dicho en el punto anterior, las altas temperaturas pueden provocar que los productos ibéricos se deterioren más rápidamente.
Por eso, en verano, podemos guardar nuestro jamón ibérico loncheado u otros productos en la nevera, con el fin de conservarlos frescos.
Eso sí, recuerda sacarlos al menos 1 hora antes de consumirlos, para que se atemperen y puedan disfrutarse mejor.
¿Cómo podemos evitar la sequedad del Jamón Ibérico en climas fríos?
Aunque ya hemos dicho que el jamón ibérico puede secarse cuando está expuesto a temperaturas muy altas, lo cierto es que, si el clima es demasiado frío, nuestra pieza también puede secarse.
Esto se debe a que, a temperaturas muy bajas, la grasa del jamón se endurece y se vuelve menos fluida.
Como consecuencia de esto, el jamón pierde humedad y se vuelve más seco.
Algunos consejos para evitar la sequedad del Jamón Ibérico en climas fríos
- Si tienes un jamón ibérico o una paleta ibérica enteros, lo mejor es colocarlos en un jamonero en una despensa o, en su defecto, en un armario oscuro y fresco.
- Si vives en una zona con temperaturas muy bajas, puedes conservar el jamón ibérico en la nevera. Sin embargo, es importante sacarlo al menos 1 hora antes de su consumo.
- Si tienes productos loncheados, guárdalos en un recipiente hermético en la nevera y asegúrate que esté bien cerrado para evitar su sequedad.
- Puedes humedecer el jamón periódicamente con un paño ligeramente húmedo o una toalla.
Mi casa tiene demasiada humedad en invierno ¿Cómo afecta esto a mi pieza de Jamón Ibérico?
La humedad es un factor importante a tener en cuenta si vamos a conservar una pieza de jamón ibérico en casa.
Una humedad excesiva, puede provocar que el jamón se ponga mohoso y pierda su sabor.
Hay que tener en cuenta que, el jamón ibérico, es un producto cárnico que contiene una importante cantidad de grasa.
Esta grasa, es el alimento ideal para el crecimiento de hongos y bacterias. Si la humedad es demasiado alta, la grasa del jamón se verá más afectada por estos microorganismos y nuestra pieza se pondrá mohosa.
Además, la humedad hace que el jamón se ablande y pierda tanto su textura como su sabor característico.
Consejos para conservar el jamón ibérico en casas con humedad
- Evita que el jamón entre en contacto con el agua, así será más propenso a la formación de moho.
- Seca el jamón con un paño limpio si se moja.
- Consérvalo en el lugar más fresco y seco de la casa, como en una despensa o en un armario.
- Utiliza un deshumidificador en la habitación donde lo guardes, así se reducirá la humedad del aire.
- En condiciones de alta humedad, es recomendable consumir el jamón más rápido de lo habitual para evitar problemas de conservación a largo plazo.
¿Qué hago si hay cambios bruscos de temperatura en el lugar de almacenamiento?
Si la temperatura del jamón ibérico cambia bruscamente, la grasa se puede solidificar o descomponer, lo que puede provocar que la pieza se ponga rancia o mohosa.
Si no es posible guardar el jamón en un lugar fresco y seco, puedes envolverlo con papel film o en un paño transpirable para protegerlo de los cambios de temperatura.
Si vives en una zona de cambios bruscos de temperatura, es recomendable comprar un jamón o paleta ibérica de menor tamaño, para que no tengas que almacenarlo durante mucho tiempo.
Optar por jamón ibérico cortado a cuchillo o a máquina también puede ser una buena opción.
Viendo todo esto, puede parecer complicado mantener nuestros ibéricos en perfectas condiciones durante la época de frío.
Pero tan solo hay que saber bien las condiciones climáticas que tenemos en nuestra casa y tener en cuenta los pequeños detalles que hemos comentado.
De esta manera, podrás disfrutar sin problema de tus ibéricos, ¡independientemente de la temperatura!
